Primero, los judíos que habían en la tristemente famosa flotilla turca capturada, luego la protesta del Comité israelí contra el derrumbamiento de casas y ahora, la lucha de las mujeres judías que desean rezar en el Muro de las Lamentaciones de Jerusalem con los mismos derechos que los ortodoxos, ya saben, los que visten con ropas antiguas y llevan tirabuzones...
Al menos estas valientes se han atrevido a dar el primer paso.
http://www.elpais.com/articulo/sociedad/Judias/ortodoxia/elpepusoc/20100722elpepisoc_5/Tes
Patricia López Muñoz
Técnico Especialista en Inmigración
Técnico Superior en Animación Sociocultural
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